ALGO MAS SOBRE LA TECNICA DE SEMANS

Utilizada para la eyaculación precoz o ausencia de control eyaculatorio, cree-
mos que no está bien descrita en la literatura, pues no se acompaña de los fundamen-
tos fisiológicos, que el paciente y, desde luego, el terapeuta deben conocer. La técnica
se basa en el “apretón” de la uretra peneana cuando el pene está erecto, logrando la
detumescencia por tres veces y la introducción con la cuarta erección.

También puede comprimirse el pene luego de la penetración, desinsertándolo
cuantas veces sea necesario y se vuelve a buscar la detumescencia y una nueva
reinserción al recuperar la rigidez.

Desde luego, esta técnica requiere que la erección esté indemne y no es posi-
ble aplicarla en la mayoría de las personas de mayor edad. Lo que debemos acotar es
que tanto el paciente como su mujer deben saber porqué están practicando esa técni-
ca, pues de lo contrario suponen que participan de una suerte de juego mágico y no es
así.

La razón de la técnica de Semans radica en el hecho fisiológico de que cada
vez que hay erección, se forma semen proveniente de la próstata y las vesículas
seminales, sobre todo, siendo la primera erección de una serie, la más voluminosa,
cerca de los 5 cc en los jóvenes. Lograda la erección, en realidad no debe esperarse a
sentir la inminencia eyaculatoria para efectuar la compresión, pues en esa etapa ya se
estaría en un camino sin retorno, hacia la eyaculación. Por tanto, sólo basta con que el
varón llegue por estimulación de su pareja - también puede realizarse a solas - a la
rigidez peneana, y entonces se comprime con el pulgar derecho – o el dominante – de
la compañera, colocado sobre la uretra o parte inferior del pene, a la altura del frenillo
y los demás dedos haciendo palanca en la parte superior del pene, lo cual provoca un
reflejo de inhibición de la erección. A veces debe comprimirse muy fuertemente, pues
hay erecciones que no ceden con facilidad.

Lo que pasa a nivel de la uretra prostática es que el semen acumulado duran-
te la excitación, pasa a la vejiga cuando la rigidez se inhibe por la compresión, donde
se diluye, y hay un alivio que no es orgásmico, por lo que no se acompaña de período
refractario. Por eso es posible estimular el pene casi enseguida y lograr una nueva
erección tres veces más, de acuerdo al esquema del ejercicio de Semans. Con cada
nueva erección, se forma menos semen que la vez anterior, un volumen aproximado a
la mitad de la vez anterior, y una nueva compresión (la segunda) vuelve a verter ese
semen en la vejiga y sin sensación de alivio orgásmico ni refractario. La tercera
estimulación sólo se hace por mayor seguridad, pues el semen que se forma es mucho
menor y la compresión tercera y última, vacían nuevamente el contenido uretral en la
vejiga. La cuarta erección ya casi no se acompaña de formación seminal en la uretra
posterior, y por eso se recomienda la penetración. Con esta última, la presión y urgen-
cia eyaculatoria seminal es mínima, y el orgasmo puede controlarse mucho mejor.

No obstante los factores psíquicos como la ansiedad y el temor, siguen ope-
rando y pueden acelerar la eyaculación, pero la Técnica de Semans ayuda a disminuir
el volumen seminal de la uretra posterior, y por ende, disminuye la urgencia eyaculatoria.
Este es tan solo uno de los factores operantes en la eyaculación precoz. El bajo umbral
de descarga del reflejo orgásmico puede elevarse con otras técnicas como el Ejercicio
de Kegel y los medicamentos mencionados.